Ya está aquí el ansiado remaster de la clásica saga Tomb Raider que en 1996 vio nacer a Lara Croft. Aventurera, arqueóloga, profanadora de tumbas y sus tesoros, poca gente debe de existir en el mundo que aún no sepa quién es. Un personaje que traspasa fronteras (en su caso de los videojuegos al cine y antes de eso a los cómics), protagonizando anuncios en Francia y codeándose con bandas de música de la talla de U2.
Hoy, 14 de febrero de 2024 y coincidiendo con San Valentín Tontín -y también con el cumpleaños de Ken Masters (Street Fighter), que según su biografía nació en 1965-, RetroNewGames se hace eco de esta entrega con una entrada en la que os hablaré de mi descubrimiento de la citada saga, celebraré su aniversario y daré mis impresiones sobre este lavado de cara que acaba de salir a la venta tanto en consolas como en PC. De momento, sólo en plataformas digitales.
Lara Croft está de cumpleaños
Aunque fue un 25 de octubre de 1996 cuando Tomb Raider llegó a las tiendas de medio mundo, la fecha de hoy se corresponde en realidad no con el aniversario de la salida de dicho título sino con el nacimiento ficticio del personaje en la Inglaterra de 1968. Vamos, que la señorita Croft ya tiene sus buenos años encima, pero como solemos decir en el caso del buen vino, aunque Lara ya es una madurita, su belleza y carisma sigue estando vigente y como veréis le sienta muy bien.
Como sabréis, Lara es, además de una experta arqueóloga especializada en la búsqueda de tumbas y restos de civilizaciones antiguas, también una mujer con posibles y una cuenta bancaria que le permite pasarse la vida viajando de aquí para allá. Hija de los adinerados Amelia y Hensingly Croft, ya fallecidos, pero aunque tanto la historia como los nombres, así como el aspecto de Lara han cambiado ligeramente a lo largo de todos estos años y con cada sucesiva entrega, hoy no voy a hablaros ni de su currículum ni de su familia (para eso tenéis información de sobra en mil sitios y en la wikipedia), sino de lo que para mí supuso el personaje, su ambientación y sistema de juego, así como para hablaros un poco sobre mis primeras impresiones con este remaster y mi humilde experiencia con la trilogía original.
*Nota: Si quieres ir directamente al meollo y ahorrarte este tostón, puedes encontrar mis impresiones sobre el remaster un poco más allá de la mitad de esta entrada.
Y además coincide con el día de San Valentín. |
Preparando el terreno para jugar
Fue a finales de los años 90, no sabría ahora deciros ahora mismo el año exacto (aunque creo que hablamos de 1997), que estrené mi flamante Pentium 166 MMX montado por Tecnowave y conseguido en un Centro Mail de una calle llamada Elduayen, situado en la ciudad más cercana al lugar en el que me crié (vivía a las afueras de ésta y prácticamente en la montaña como Son Goku). Un equipo informático que todavía conservo con prácticamente todas sus piezas originales, y del que os dejo este vídeo que subí hace un tiempo, funcionando con otro espléndido clásico como el mítico Doom. PC que me dio grandes alegrías y algún que otro infarto, pues pese a que ya había hecho mis pinitos en Basic y tenía algo de experiencia con microordenadores de la talla de MSX, Zx Spectrum o un Amstrad, en cuanto a los sistemas con Windows 95 y MS-DOS como base, era un novato, sobre todo cuando algo no funcionaba y me veía obligado a trastear. Unos primeros pasos tanto a nivel de software como de hardware, ayudado por un amigo al que no veo desde hace muchísimos años (Daniel Ledo M), quien hoy día es programador de profesión. Menudas partidas llegamos a echarnos en aquellos años cuando bajaba hasta su casa para conectar en red local mi ordenador. Tremendo... Con él tuve la oportunidad no sólo de aprender muchísimo de informática, sino de conocer clásicos de los videojuegos tan increíbles como Doom, Quake (con su mod Cujo), Duke Nukem 3D, Warcraft, Hexen, Heretic, y otros titulazos que corrían en su Pentium 75 (creo recordar, y que no sé si conservará), que me abrieron a un nuevo mundo, superando todo lo que había vivido antes con mi SEGA Master System y mi recién estrenada Playstation 1, no porque los juegos de este sistema fueran mejores sino porque en PC se despertó mi vena creativa y algunos de ellos, como en el caso de los Fps, Simuladores y de Estrategia, se jugaban y disfrutaban mucho mejor.
Es cierto que títulos como Final Doom para PSX eran tremendos y muy manejables con un mando, pero la versatilidad que ofrecía un PC en comparación, era brutal.
Mi Pentium 166 MMX original y su configuración de hardware. |
Conociendo Tomb Raider y a su protagonista, Lara Croft
Volviendo a Lara Croft y su clásico, e igualmente a Tomb Raider; al menos a la saga de sus primeros años y que considero con más personalidad que todas las que vinieron después, recuerdo al tocayo hablándome una mañana de sábado sobre la famosa aventurera, asegurando únicamente bondades, pero nada comparable con el día que instalé el juego en mi disco duro Fujitsu de 1 giga y pude ejecutarlo la primera vez. Valiente, incansable y resuelta, el título nos ponía tras los pasos de Lara y en tercera persona (viendo su trasero), cómo superaba muchísimas estancias y trampas, algunas de ellas ocultas al hombre durante varios milenios, sin mencionar el encuentro tan alucinante que tuve con el gigantesco Tiranosaurio Rex. Había escuchado hablar tanto sobre esta escena que me la había imaginado de mil formas, descubriendo que nada era comparable a cuando éste rugía abriendo sus fauces y se lanzaba a por mí. Pocas veces habré huido a tanta velocidad de un enemigo (bueno, sí, del Cyberdemon). Sigue siendo, después de tantos años, una de las secuencias más memorables vividas en videojuego alguno.
Estas imágenes son mías a modo de comparación. Por cierto, el mayordomo camina más rápido en el original. |
Y es que en aquellos años yo era un absoluto desconocedor de todo lo que era Tomb Raider y no tenía ni idea de lo mucho que me iba a gustar. La mayoría de mis conocidos lo habían jugado un año antes, así que encontrarme con todo aquel universo en un enigmático espacio 3D con tantas posibilidades, supuso una vivencia excepcional. Ojalá hoy día pudiera llegar a sentirlo así. Recordemos que en 1997 no existían tantas facilidades como ahora para conocer contenido nuevo que iba llegando, y salvo que uno se mantuviera al día comprando revistas -lo que no era mi caso- el resto lo completaba mi propia imaginación.
Así, escuchando todo tipo de comentarios al respecto y sacando conjeturas, mi curiosidad se tornó cada vez más acuciante y no veía el momento para hacerme con un PC. Tenía ante mí grandísimas sagas de muchísimos géneros, y además desconocía que Tomb Raider había salido en Playstation, con lo que el término multiplataforma en su caso era algo que ni me llegué a plantear. Todos mis amigos de la época de instituto jugaban en PC y yo quería uno similar.
Mi colección de Tomb Raider para PSX. |
*Me voy a saltar los pasos previos a la compra de este ordenador y los días que pasaron hasta tenerlo todo configurado (daría para otra entrada), para pasar directamente a esa tarde en la que estrené mi Tomb Raider frente al PC.
En mi casa, y mientras era adolescente o todavía muy joven, mis padres rara vez me permitían poner una consola entre semana. Creían, al igual que la mayoría de la gente por aquellos años, que tener un ordenador en casa me podría pudrir el cerebro y encerrarme en un submundo oscuro y marginal. Nadie decía nada de la televisión, que eso sí agilipollaba a las masas, pero os lo digo para que tengáis en cuenta lo complicado que era usar el PC. Para que luego se quejen los chavales de ahora...
Disponer por tanto de un videojuego cuando quería, era misión imposible. Este pensamiento de encefalograma plano provocó que mis padres decidieran que el PC sólo se utilizase para algo "útil" y no estuviera en mi casa sino en la de mi abuela. Otro día os cuento las mil peripecias vividas y un tío que me criticaba y vigilaba, cuando me quedé enganchado al primer Command and Conquer, Warcraft 2, Civilization o Quake.
Y el momento llegó
Lara Croft había llegado a mi vida para ponerla patas arriba. Primero en PC, que fue donde terminé la saga clásica junto a las expansiones de este recopilatorio y las versiones modernas que salieron tras éstas antes del Reboot, hasta que un día decidí hacerme con la saga para la primera Playstation, completándola con Tomb Raider Chronicles, videojuego que fue el último de los clásicos en conseguir.
Vamos, ahora sí, a hablar del Remaster.
Vivimos una época en la que nos hemos vuelto profundamente gilipollas. |
Tomb Raider I-III Remaster
Trataré de ser sincero. Si bien este recopilatorio es fantástico y está muy bien hecho a nivel visual y técnico (salvo por el mensajito o 'disclaimer' que hay sobre estas líneas y que he tenido que leer varias veces al ejecutar por primera vez el juego para darme cuenta de los tiempos de auténtico retraso mental que vivimos), he de seguir recomendando jugar a las viejas entregas para dejar este remasterizado hasta otro momento. No porque éste me decepcione o porque desvirtúe de alguna manera la trilogía (cosa que no hace, sino más bien al contrario) sino porque es preferible si accedemos por vez primera a los viejos Tomb Raider o si queremos disfrutar de la experiencia original.
Y es que aunque resulta llamativo y sorprendente ver las diferencias entre ambas versiones (pulsando F1 en PC y Start en el mando hará que alternemos entre los gráficos clásicos y los modernos) las nuevas opciones con las que cuenta el recopilatorio harán que finalmente abusemos de ellas pervirtiendo conceptos jugables y aligerando su dificultad. Desde el manejo de tipo tanque, que aquí puede desactivarse, hasta aquellas que a nivel gráfico nos lo ponían más difícil a la hora de explorar. Así un saliente, un risco, incluso un pequeño objeto que podría pasar desapercibido y que se mimetizase de algún modo en el paisaje, una palanca, etc y todo aquello que antes podría atragantarnos y llevarnos más tiempo para investigar e investigarlo, ahora puede ver alterado su efecto al ofrecernos la posibilidad de realizar dichos cambios en tiempo real. Se corre así el peligro de convertir los retos en un paseo y haciendo el juego algo más fácil de cómo debería de ser. Qué queréis que os diga, pero si incluso tenemos una opción para resaltar los objetos y las acciones a realizar...
También podemos alternar en tiempo real con las pantallas de carga. |
Tengo por tanto, con este recopilatorio, sentimientos muy encontrados. Por una parte, me gusta cómo ha quedado, pero por la otra, yo quitaría o bloquearía determinadas opciones. Incluso obligaría al jugador a acabarse el juego original una vez como mínimo. Quizás sea un pensamiento muy nazi, pero a veces intentar mejorar y hacer más accesible un juego con cierta solera, o eliminar aquellas supuestas carencias -o las que hoy son consideradas como tal- provoca un efecto dominó o mariposa irrecuperable que puede conducir al fracaso la idea de un título en origen. No debería tocarse, al menos, muchas de esas relativas mejoras, dejando de este modo el juego tal cual se concibió. Tenemos la caprichosa manía de ver las cosas de antes con los ojos del presente y creernos más listos por ello, pero eso no siempre debería de ser así. Esa es mi opinión.
Otra imagen comparativa. En este caso no es mía sino de Vandal. |
Jugabilidad
Continuando con el aspecto jugable, deciros que pese a que han respetado el diseño de los niveles y éstos parecen en la práctica un calco (notándose aún más con los gráficos originales activados), una vez metido en harina y comparando cualesquiera de las versiones con las que jugamos en los años noventa y pantalla a pantalla, se puede observar que ni con el aspecto "viejuno" éstos se comportan de idéntico modo. No sabría deciros cómo en palabras, pero se nota (subiré un vídeo donde se ve), pues aunque el cambio es muy leve y me atrevería a decir que imperceptible (de hecho hay que fijarse a niveles enfermizos), se nota que hay algo extraño en los niveles desde el primer Tomb Raider de 1996 hasta Tomb Raider 3. Supongo que se debe a que las medidas del mapa no son del todo exactas, posiblemente por muy poco, pero escalones, salientes, y otros elementos arquitectónicos, hacen que cada salto o carrera, cada cornisa a la que aferrarse y hasta el acceso a un pasaje, no se comporte igual. Es muy leve, repito, pero se nota. Sobre todo en algunas aristas que en el original caen en recta formando un ángulo de noventa grados, y sin embargo con el remasterizado adoptan una forma algo más triangular. Esto hace que uno vea mejor el terreno y pueda permitirse caminar por encima o acceder a lugares que antes eran prácticamente imposibles. Puede que lo note por hallarme ahora mismo rejugando los clásicos en Playstation, pero si uno observa con lupa, acabará descubriendo que las similitudes no son al cien por cien. Además, dotar a Lara de mayor fluidez en sus movimientos y capacidad de respuesta, y evitar la tosquedad que tanto echaba para atrás a muchos de los jugadores, conlleva un nuevo estilo de juego más sencillo. Y se me olvidaba, existen ralentizaciones, máxime en el cambio a los gráficos originales. Apenas unas pocas imágenes por segundo, eso sí.
Aristas y vértices no son iguales al 100% |
También
existen algunos problemas con la cámara en movimiento, notándose especialmente al arrimarse a una pared y cambiando nuestro ángulo de visión. Un problema que nos resultará más incómodo si es que nos encontramos ante un ataque, pese a que podemos modificar el ángulo muerto en las opciones. Aquella que tiene que ver con el modo libre, la que nos permite observar nuestro entorno, al menos en PC no se encuentra en el teclado numérico como entonces, obligándonos a acudir a su configuración.
Otro de los problemas que he visto han sido los que tienen que ver con el cambio de las texturas, de las que hablo más abajo, añadiendo elementos que, para mi gusto, desentonan en exceso y otros que se "ven" demasiado. Un efecto de tipo cell-shading que hace difícil visualizar algunos objetos o pulsar alguna palanca mimetizándola, e incluso viceversa (ocurriendo todo lo contrario y siendo más fáciles de ver con los gráficos actualizados) como también otros inconvenientes como la muestra de algunas superficies con líquidos, pareciendo más una capa de leche que agua o efectuando un efecto anacrónico dentro del propio juego respecto al acabado general. Esto no sé si ha sido hecho a propósito, pero queda bastante mal.
En el Tomb Raider original los objetos no brillaban. Fuente de las imágenes - Retronewgames |
En el remasterizado... sí. |
Mejoras
Sin embargo, y aunque pueda parecer que le estoy metiendo una buena turra al juego, no es esa mi intención. Son pequeños fallos, cosas un tanto asumibles y que no cambiarán nada nuestra percepción de los clásicos si es que ya los hemos jugado y terminado. No hay impedimento alguno para disfrutar de esta joya y gozar con sus muchas mejoras, pues en su favor tenemos nuevas texturas, nuevas pantallas de carga y otras que ya estaban pero más trabajadas, un cuerpo de Lara más bello con resoluciones más altas y mejor movimiento, así como escenarios estilizados, un buen uso de sombras junto a otros efectos lumínicos y volumétricos (haciendo más oscuros la mayoría de los niveles), además de alucinar con efectos como la nieve cayendo o el vaho de nuestro aliento y, en conjunto todo más nítido y definido. Son éstas y otras muchas maravillas visuales las que os invito a descubrir y que justifican acercarse a este remaster aunque sólo sea para poderlo probar. Un buen homenaje, no vamos a negarlo.
Los niveles, con este lavado de cara, cobrarán una nueva dimensión. Imagen de Steam. |
Sonido
En cuanto al sonido y su doblaje, o su banda sonora, deciros que se han respetado los títulos originales así como aquellas pistas que servían para dotar al juego de mejor ambientación. Su calidad se mantiene y mejora en el caso del remasterizado (añadiendo reverberación y otros efectos, por ejemplo), encontrándonos eso sí y por sorpresa con un Tomb Raider 1 y un Tomb Raider 2 traducidos al español (pese a que en Steam los originales siguen estando en inglés). Incluso Tomb Raider 3 lo tenemos íntegramente doblado al castellano.
*Aunque la imagen de abajo aparece en inglés, podemos cambiar el idioma en las opciones.
Podemos navegar desde el menú como en los originales, pudiendo escoger la entrega que deseemos. - Imagen mía. |
Contenido
Poco voy a deciros acerca del contenido de este recopilatorio en el que se incluyen además de las tres primeras entregas aquellas sendas expansiones que muchísima gente todavía desconoce. Grandes aventuras y niveles que se suman a la lista, tales como Unfinished Business (para el primero), Golden Mask, para el segundo, y The Lost Artifact para el tercer videojuego, que únicamente salieron en su día en PC; redondeando así las horas de entretenimiento con nuevos puzles y retos que nos harán gozar. En conjunto consiguen llegar hasta las sesenta horas de juego, pero os diría que, con calma y explorando cada uno de los niveles (en mi línea, por cierto), bastante más. Como contra está el hecho de que no se han añadido las entregas de The Last Revelation o Chronicles, aunque viendo el precio de salida, casi unos 30 euros sin descuento (27 € para los que tenemos los originales en Steam, lo que es una rebaja de completísima mierda), estoy más que seguro de que acabarán sacando estos dos últimos como descargables y a un precio similar. Tontos no son los desarrolladores. Los tontos somos nosotros aún sabiendo lo que hay.
Se me olvidaba comentar más arriba que el juego cuenta con un modo fotografía, ideal para los pantallazos, compartir en las redes, permitiéndonos girar la cámara y disfrutar de nuevas perspectivas, pese a que la he encontrado muy poco intuitiva.
Gráficamente cambia bastante - imagen de Steam. |
Conclusión
Editado el texto que daba cuerpo a esta entrada, podría decirse que no estoy contento del todo con el resultado y, a decir verdad, esto es cierto aunque me gustaría decir que con importantes matices. Sigo recomendando jugar primero a los originales más allá de este recopilatorio, ya que éste nos pone al alcance de nuestra mano diferentes opciones que lo pueden llegar a pervertir. No hay peligro en el caso de los jugadores más veteranos que ya se lo terminaron, pero estoy convencido de que los nuevos sí o sí van a servirse de ésto hasta la saciedad. El lavado de cara me encanta e invita a jugarlo para ver cuánto ha cambiado en conjunto y los nuevos efectos fascinan, pero a la hora de la partida, al menos jugablemente, se me hace un tanto extraño y siento que algunas cosas no están como deberían de estar. Es leve, pero se nota (en escalones y salientes, que no son de idéntico tamaño aunque por una diferencia casi imperceptible). Puede que en mi caso se deba a encontrarme ahora mismo rejugando los originales, pero incluso poniendo el clásico frente a frente, y cambiando el remasterizado a los gráficos de antaño, se puede ver que la diferencia está ahí. Otra cosa es el control de la cámara, que me costó horrores poder ubicarla y la veo completamente a desmano, lo que seguramente lo acaben mejorando con un parche.
De todos modos, y pese a los defectos descritos, lo bueno de este Tomb Raider I-III Remastered es que respeta muchísimo por no decir en casi todo al título original. Luce fantástico y Lara enamora con su nuevo acabado (más proclive hacia las entregas intermedias antes del Reboot), permitiéndonos cambiar entre los gráficos nuevos y los originales con sólo un botón.
Vídeo subido por mí al canal 👇
Lo que sí me ha hecho muchísima gracia, y que es sinónimo de la época estúpida que estamos viviendo, es el hecho de que los desarrolladores se "excusan" avisándonos con una pantalla al inicio de que el juego contiene situaciones ofensivas y tópicas contra lo que nada pueden hacer porque variarían el argumento y el juego tal como se desarrolló. En dos palabras:
MENUDA GILIPOLLEZ.
Lara se mueve de manera muy fluida. - Imagen de Steam. |
*Entrada que editaré a lo largo de esta semana.
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