Xogo - Retro: Enduro Racer (Sega Master System)

Hace ahora la friolera de 12 años -que se dice pronto- que os hablé en este blog del mismo que hoy nos ocupa (aquí), aunque en esa ocasión lo hice hablando de la mayoría de los sistemas para los que había salido y con una muy pequeña reseña dedicada a la máquina de SEGA de 8 bits. Enduro Racer, un título original de recreativas, pero que, como muchos otros grandes videojuegos de la época, también tuvo su versión para el hogar.

 

Pese a que, como ya os digo, hice una pequeña reseña de este juego por aquel entonces y también lo acabé incluyendo en "en el paquete", el haber estado disfrutando de él ayer mismo ha sido incentivo suficiente para, de manera actualizada, volver a hablaros de él.

Enduro Racer (versión PAL):

Historia:

Con salida en el año 1987 y desarrollado por la propia SEGA, este es un port rediseñado de la recreativa que, como podréis ver en las imágenes adjuntas en la reseña, cambiaba su aspecto para ofrecernos una vista isométrica que, por supuestísimo, modificaba por completo la manera de comprenderlo y por consiguiente su jugabilidad.

Un título que acabaría saliendo hasta en tres versiones, destacando entre todas la que se vendería en Japón (mucho más completa) y bastante más tarde la perteneciente a Brasil a cargo de Tectoy.

Mi copia original de Enduro Racer.

Como buen arcade de motos, y pese a los cambios introducidos, la de Master System conserva perfectamente su adicción y rejugabilidad en un videojuego dedicado al mundo del motor; llevándose la peor parte la que saldría en Europa y Estados Unidos, sobre todo por reducir el tamaño del cartucho a la mitad y viéndose traducido en un inferior número de niveles, menor duración y dificultad. Una lástima que por aquellos años, pese a que fuimos el mercado que más tiró de la consola, las regiones Pal en su mayoría se llevasen la peor parte. 

Comparación entre la pantalla inicial occidental y japonesa.

 

Gráficos:

Resultones, que me encanta este adjetivo, y encantadores además de coloridos. De nuevo incido en que el mejor apartado gráfico y variedad se la lleva la versión japonesa. Sin embargo las que nos llegaron más allá del país del Sol Naciente, sirven de elogio para la consola no sólo por el diseño de los elementos en pantalla sino, sobre todo, la velocidad con la que se mueve el scroll. Si habéis tocado otros videojuegos de tipo arcade, carreras y demás en la máquina de 8 bits, sabréis que, pese a ser una consola muy solvente, algunos otros títulos "renqueaban" ligeramente una vez acelerábamos y nos poníamos a jugar. Por ejemplo: Outrun. 

Además del diseño de nuestro corredor, motocicleta, y demás participantes así como las distintas evoluciones como cuando por ejemplo nuestra montura arde en llamas y el cambio más radical que es la vista isométrica, la mayoría de los circuitos cuentan con bastantes elementos en pantalla que no sólo sirven de adorno, siendo también indispensables ya bien como obstáculos o simplemente para hacernos morder el polvo.

En ocasiones acabaremos besando el suelo.

5 niveles (en la versión de Occidente), de buen gusto y variado, que en el caso de la que llegó a nosotros pecan de algo vacíos siempre en su justa comparación. 

La intro, el final del juego, al igual que los interludios por fase, son por desgracia bastante escuetos, aunque de eso hablaremos en el apartado de la versión japonesa.

 

carátula europea.

Sonido:

Pocas melodías, pero que aprovechan bastante bien la capacidad de la negra de 8 bits. Creo recordar que el cartucho disfrutaba de calidad FM (sólo disponible en máquinas adaptadas o japonesas), pero como en este caso concreto no lo tengo muy claro, pues la cosa queda ahí. Sólo sé que no sé nada y que la mayoría de juegos que aprovecharon dicho chip salieron a finales de los años 80 (entre 1987 y 1989 concretamente...).

Aún así, Enduro Racer criba muy bien las melodías con las que cuenta, acompañando sin estridencias y de manera acertada cualquiera de las que tocan en cada nivel. 

Los sonidos, sé que me repito y que parece una frase manida que resume todo y no dice demasiado, pero cumplen correctamente y sin mayor pretensión. Digamos que estarían entre la media respecto a lo que el chip de sonido puede dar. Sería un "puntazo" añadir voces digitalizadas, sonido del público, pero al final lo que importa es jugar y en eso Enduro Racer lo hace bastante bien.

los circuitos de la edición japonesa están más cargados.

Jugabilidad:

Como buen arcade que se precie, Enduro Racer nos pone al mando de una motocicleta de cross en un deporte que requiere además de capacidad, muchísima concentración... (o acabaremos estrellándonos). El recorrido está lleno de obstáculos y, además de piedras, árboles y otros elementos como baches e incluso la hierba o el agua que hará que vayamos algo más lentos, los vehículos y motocicletas de los rivales suelen salirnos al paso o cambiar de trayectoria cuando mejor tiempo estemos haciendo. También disponemos de las ya típicas rampas que harán que saltemos -pudiendo incluso manejarnos desde el aire en contra de su realismo-, las cuales podremos aprovechar mejor ganando algo de velocidad si es que pulsamos en el momento adecuado, y en sentido contrario de nuestra marcha, el botón direccional. Adelantaremos además algunos segundos ralentizando el cronómetro en hasta un 25%.

Tiempo que, también juega en nuestra contra al disponer de un contador que llegará a cero, obligándonos a empezar de nuevo.

Mi MS2 con Enduro Racer.

 

En general es un juego difícil aunque sólo durante los primeros intentos hasta que nos acostumbremos a su mecánica, y aunque los diferentes adversarios serán mucho más numerosos a partir de la segunda ronda (5 circuitos en la versión Pal que se repetirán por segunda vez aumentando la dificultad), en nuestro favor y siempre dependiendo de la cantidad de rivales que vayamos adelantando, el juego nos otorgará una serie de puntos que podremos canjear por ciertas mejoras como motor, volante, aceleración y reparación. Algo más que recomendable y a tener en cuenta si lo queremos terminar. 

A colación de lo dicho, la moto cuenta con un medidor de daños que hará que nuestra efectividad en carrera se vea mermada poco a poco. Razón de más para no desdeñar los puntos acumulados y elegir sabiamente qué es lo que queremos arreglar.

Aprovechar el salto ayudará a ganar algunos segundos...

Conclusión: 

Un buen juego, divertido y entretenido aunque en su versión occidental se antoje un pelín corto. Sobre los 20 minutos aunque jugados de manera intensa, con gráficos bastante vistosos y una sensación arcade muy cuidada. Totalmente recomendado.

Lo mejor:

-Entretenido y desafiante.

-Buenas melodías. 

-Cambio de perspectiva respecto a la recreativa.

Lo peor: 

-Sólo 5 recorridos en la versión occidental y por ello...

-... es algo corto.

Aunque parece simplona, no es de las portadas más feas.

 

La versión Japonesa:

Como ya he dicho hasta la saciedad, la versión del país nipón se lleva la palma en todos los aspectos. Intro y finales bastante más cuidados con imágenes insertadas, además de una variedad de elementos en pantalla, interludios (como un mapa del recorrido realizado) y número de niveles que doblan lo visto y, suben también la dificultad, en la versión occidental. Contando con la segunda ronda y puesto que esta opción tiene diez niveles, al final nos hacemos con la cifra de veinte carreras. Sin duda, la mejor.

Curiosidades:

-en el menú y con una combinación de teclas concreta, podemos acceder a cada uno de los circuitos.

-Tectoy sacó el mismo juego traducido al portugués brasileño bajo el nombre de Super Cross.

Mejor tiempo obtenido en la última partida finalizada.