Entre los muchos recuerdos que tengo y que me acompañarán hasta el día de mi muerte, uno de los que más sentimiento de nostalgia traen a mi memoria es aquel en el que por primera vez, siendo todavía un infante, descubrí lo que era una máquina recreativa. Ocurrió en un viejo bar del que entonces era mi barrio (uno de tantos de los años 70), y junto a mis tíos, allí mismo, supe a partir de aquel instante el hallazgo tan increíble que marcó el inicio de una nueva realidad. Sería por tanto el comienzo de un largo amorío a través de los sueños y los videojuegos, una afición que, como el buen vino de marca y abolengo, con los años mejoraría tanto en fuerza como en intensidad.
*Texto revisado y actualizado con más detalle el 26 de septiembre de 2023. Iba a poner las partes cambiadas y añadidas en cursiva, pero finalmente van con la fuente normal.
Imagen promocional del Mayflash Arcade Fightstick F300 |
Extasiado por lo que estaba viendo en pantalla, toda la planta de aquel fascinante y misterioso artilugio que reunía como posesos a jóvenes aún imberbes y a veteranos, me sentí por primera vez en mitad de un gran revuelo y no poca expectación. Todo el mundo deseaba participar de aquel nuevo invento recién llegado -dejando casi de lado a las tragaperras e incluso al todopoderoso futbolín- siendo una puerta abierta hacia multitud de aventuras infames y otras en las que debíamos hacer ver nuestra valía, pero de las que por fin éramos los auténticos protagonistas, deseos sólo imaginables en nuestros sueños y en la imaginación. Pequeñas y simples historias a golpe de cinco duros de las viejas pesetas (25 para los que no convivieron con la añorada moneda) y que sólo los que vivimos aquella época podemos ahora rememorar.
Lamentablemente, ése fue un tiempo que ya pasó y que jamás volverá, con lo que podéis imaginar mi grata sorpresa cuando, a mediados de los años noventa (que también ha llovido lo suyo), descubrí lo que suponía el software de Mame y los primeros compases de la emulación recreativa en PC. Volver a revivir aquellos momentos que casi estaban olvidados fue como un regalo prácticamente caído del cielo, pues no daba crédito, aunque todavía faltaba algo más importante y que haría que disfrutase del sabor de los salones arcade de una manera más fidedigna y, por ende, muchísimo mejor.
El Mayflash F300 junto a mi viejo SEGA Control Stick de Master System. |
Porque, a pesar de la novedad y de haber estado durante los primeros días realmente enganchado, la experiencia no era del todo completa y distaba muy lejos de lo que era una máquina arcade, aunque eso tenía "fácil" solución: hacerme con una recreativa como las de entonces aunque construida de forma casera para ahorrarme un dinero, lo que suponía no sólo esfuerzo sino la búsqueda de un espacio lo suficientemente amplio como para tenerla y siendo esto último lo más difícil de conseguir.
Y sin embargo, hace poco ha llegado a mis manos el protagonista de el "En el Paquete" de hoy.
MAYFLASH ARCADE FIGHTSTICK F300
Considerado entre los usuarios más veteranos como un Arcade Stick de entrada para principiantes y por ello de gama baja (calificación con la que difiero debido a la robustez de sus materiales, manejo, sensaciones y compatibilidad, teniendo en cuenta además que existen modelos bastante inferiores en acabados y prestaciones), he descubierto un hardware a priori bastante decente y dotado de un gran potencial. No en vano sigue siendo uno de los productos más demandados en la web del fabricante y, aunque la bajada de precios de sus hermanos mayores son hoy por hoy su mayor amenaza, todavía se mantiene como una muy buena opción. Un producto además, el cual deseaba tener hace años (no éste en concreto, sino similar), porque aunque montar una recreativa casera fue siempre uno de mis mayores anhelos, la falta de espacio lo hacía inviable. Huelga decir que soy un jugador de la vieja escuela y que prácticamente me crie entre salones recreativos, videojuegos y máquinas Arcade, con lo que está de más avisar que éste no es ni mucho menos mi estreno usando este tipo de hardware. Eso sí, ahora puedo decir bien alto que es el primero de su estilo que poseo de un modo formal. También os digo que ya era hora.
Pero pasemos de presentaciones y hablemos de...
Mis sensaciones al joystick con este Mayflash F300:
Como viejuno que soy y ya con mis buenas experiencias a la espalda, he tenido la suerte de probar casi todo tipo de periféricos, cachivaches y mandos a lo largo de mi vida. Soy eso sí, mal que les pese a muchos, amante del retro y de las mecánicas clásicas (por toscas y arcaicas que a otros parezcan, a mí realmente no me suponen ningún problema), pero lo más parecido que he llegado a tener entre mis manos es el SEGA Control Stick de Master System; un joystick muy poco conocido por el gran público creado especialmente para la magnífica consola de ocho bits, y en el que todos los que llegamos a usarlo coincidimos en que es de los periféricos más incómodos que existen. Primero, debido a la extraña disposición de sus botones (en vez de situarse a la derecha para diestros lo hacen a la izquierda como si sólo se hubiera creado para zurdos), y su palanca en forma de T. Soy propietario de dos de ellos, uno comprado a principios de los años 90 y otro incluido en una Master System 1 conseguida durante los primeros años de la década del 2000. Mando que únicamente utilizo ahora y entonces con uno de mis videojuegos deportivos en su sistema original: el entretenido Slap Shot. ¿Qué quiero deciros con todo esto? Pues que ahora mismo salvo eso y parte de mis recuerdos, no tengo ninguna otra referencia palpable y más cercana a modo comparativo. De lo que sí estoy más que seguro es que poco o nada
tiene que ver el uso de un Stick barato y de andar por casa, de marca chinorris y con materiales mediocres, con uno más enfocado al Arcade como es el F300, incluso teniendo en cuenta que está por debajo de los cien euros. Es como pretender comparar el nivel de un colegio con la Universidad. Simplemente no tiene color ni punto de comparación. De todos modos he de decir que, al principio y durante los primeros minutos, acostumbrarme al stick rematado en bola y no en un bate, me costó más de lo que pensaba y mis impresiones primeras no eran del todo halagüeñas. Un efecto equivocado que acabó por disiparse tras un tiempo, atreviéndome a decir sin ninguna duda que este Arcade Stick F300, aún estando en un rango que considero medio, es de los mejores periféricos y más recomendados que un amante de los videojuegos pueda tener en su hogar.
Comparándolo Mayflash F300 con el sabor de una máquina recreativa:
A estas alturas todos tenemos muy claro que no es lo mismo disponer de una máquina recreativa en el salón de tu casa que un Arcade Stick rematado en bola o con forma de bate, por bueno que sea. Las sensaciones al tacto, pese a ser idénticas (gracias a los componentes Sanwa o la española Industrias Lorenzo), tanto el ambiente de los salones de los años 80 y 90 como el conjunto del mueble son dos características fundamentales para revivir la experiencia completa. Lo mismo que tampoco es comparable ver una película sentado en la butaca de un cine con sus palomitas que hacerlo en el sofá por mucho que la definición del televisor sea en 8k. Sin embargo, siendo sincero y sólo si somos capaces de centrarnos en lo que ocurre en pantalla, una vez pasemos a la acción y nos dejemos llevar por el sabor del recuerdo, la diferencia se acorta de tal manera que cuesta creer que algo muchísimo más barato y menos aparatoso sea capaz de aportarnos todo un sinfín de sensaciones. No es que se le acerque, sino que es lo más parecido y lo más recomendable de no poder tener una maca montada o una Bartop.
Posibilidades de ampliación y personalización del Mayflash F300:
Como podréis ver, y aún tratándose de un Stick mejorable en ciertos aspectos -sólo al lado de gamas superiores como el F300 Elite con botones Sanwa Denshi o Seimitsu de serie o el más voluminoso F500- esta versión "normal" tiene el potencial suficiente como para convertirse en el aparato definitivo para revivir la experiencia más Arcade desde la comodidad de tu sofá. ¿Deseas mejorar la botonera y el stick que se incluye porque el tacto no te convence y quieres revivir la época dorada de los Arcade? Fácil... simplemente tenemos que abrirlo por debajo, sacar la plancha metálica que oculta sus faldas y con un poco de paciencia y sin conocimiento alguno de electrónica, cambiar tanto botones como la maneta por cualquiera de las marcas mencionadas o la que mejor se adapte a nuestra forma de jugar. Y no sólo eso, sino que también podemos cambiar su aspecto visual con un vinilo dedicado y con cubierta de metacrilato a nuestra elección. Algunos modelos más caros hacen esta última tarea algo más fácil, pero que sepáis que también es posible. Quiero recordaros además de que existe un modelo, el MayFlash F101, algo por debajo de éste en cuanto a características y por lo tanto de precio. Muy, pero que muy similar.
Personalmente, y salvo que se estropeen algún día los componentes por machacarlos, cosa que no va a suceder en muchísimo tiempo ya que como dije antes me parece un producto bastante robusto con un frontal muy duro, no tengo prisa ahora mismo ni mayor interés por modificarlo y menos con los precios que se barajan incluso en tiendas online como Aliexpress. Quizás más adelante acabe por ponerle algún tipo de vinilo para cubrir ciertas imperfecciones (el producto que he conseguido es de segunda mano y ha sido bastante maltratado), pero poco más. Sé que muchos me dirán que las sensaciones aplicadas con botones de la casa Sanwa y una palanca de bate Seimitsu son mucho mejores e idénticas a las de los salones, pero teniendo en cuenta que tampoco me he decidido del todo por escoger nuevos colores y ya que el uso que le voy a dar por el momento va a ser normalito, quiero y me reservo al menos para dedicarle un tiempo disfrutándolo con el diseño y las piezas originales que, sino lo he dicho antes, son clónicos de tipo OEM.
También se le puede cambiar el restrictor cuadrado que trae de serie por uno octogonal o circular, siendo éste último mucho mejor para jugar. Algunos vendedores los incluyen en la caja, por cierto.
Firmware y Compatibilidad:
A día de hoy, (actualizado el texto a 26 de septiembre de 2023), la versión de firmware que podemos encontrar en la web del fabricante (www.mayflash.com) es la 2.24 que añade soporte para Mac. Mi versión de Mayflash llegó con la 1.13 aunque nada más recibirla la actualicé fácilmente a la 1.16 (pondré imágenes del proceso un día de éstos). No sólo es recomendable sino harto necesario, puesto que cada actualización añade mejoras y nuevas compatibilidades, ofreciendo todo un amplio abanico de consolas y sistemas entre los que cabe destacar PC, Mac, Nintendo Switch, Neo Geo Mini, Playstation 3, Playstation 4, Xbox 360, Android y Xbox One o las Series X. Como veis pocos sistemas deja al margen, pese a que sí se echa en falta que sea compatible con sistemas algo más viejos como Wii U, Wii, PSX o Playstation 2 (plataformas que sí eran compatibles con revisiones anteriores de este mismo Mayflash). Lo bueno es que al ser compatible con PC, lo es también con cualquiera de los emuladores existentes. Ya como único defecto posible, aunque sólo sea por engorro, es el hecho de que para consolas como las de Microsoft o Playstation 4 se necesite conectar un mando original al USB de tipo C.
Ya casi estamos acabando, pero antes de nada, voy a deciros el estado de...
El Mayflash F300 que me ha llegado:
Con evidente desgaste en las letras que le dan nombre al modelo y una pequeña rotura justo por encima de la base en la parte frontal (imagino que el anterior dueño quiso sacar la tapa inferior e hizo palanca con un destornillador, porque sino no me lo explico), la revisión que me llega de este Mayflash es la 1.1 de fábrica y con firmware 1.13. A simple vista, únicamente difiere de las siguientes (como la 1.3) en la disposición de las letras y la inclusión del dibujo de un mando en su entrada USB. Llega además sin su caja original y sin el restrictor opcional de ocho lados que incluían en los posteriores modelos (cuesta unos 6 euros por separado y tampoco me corre prisa ya que no he tenido problemas para adaptarme aunque está claro que mejora la jugabilidad), como tampoco incluye su manual. Su aspecto inicial al abrir la caja, hay que decirlo, era bastante desolador; completamente comido de mierda y con una sustancia pegajosa que hacía que los botones se quedasen completamente pegados durante sus pulsaciones (tocados con guantes, porque no me fío), al igual que el mismo líquido cubría gran parte del resto de la superficie. Gracias a Dios no es nada que con paciencia y una buena limpieza no se solucione, consiguiendo que luzca finalmente en condiciones y todos sus mecanismos funcionen de manera correcta. De verdad que me alucina sobremanera que la gente envíe algo en esas condiciones y no tenga ni la más mínima vergüenza ni reparo. Lo único bueno es que iban a tirarlo, y ahí estaba yo. No es por ser desagradecido, porque a caballo regalado no le mires el diente, pero me llama mucho la atención que se maltraten cosas que valen su dinero. Y más este producto, que ronda entre los 50 y 80 euros.
A la pequeña rotura, simplemente y porque tampoco tenía nada más a mano, le he puesto cinta adhesiva de color negro, bien cortadita y con el tamaño adecuado. Soy un poco manías con esos detalles, pero para mi sorpresa, ni siquiera viéndolo de cerca y con ese "apaño", ahora llama demasiado la atención. Da bastante el pego, la verdad.
También se evidencia algunos pequeños puntos de óxido en la tapa metálica que lo cierra, como algunas letras casi desaparecidas del todo, imagino que por un tute tremendo, haberlo guardado en un trastero con algo de humedad, y tal como estaba cuando abrí su caja, seguramente sudor.
En fin...
Características incluidas (en los modelos por estrenar):
-Conexión USB (ideal para PC).
-Casi 2 kilos de peso (es bastante estable aunque se recomienda añadir algo más de peso en su interior para mayor contundencia). Por suerte la caja interna tiene todavía algo de espacio para remediarlo.
-8 botones jugables (he de decir que se notan muy normaluchos y algo endebles al tacto aunque eso es una impresión errónea pues aguantan bastante el tipo). Todos ellos se pueden cambiar por otros de alta gama con la consiguiente mejora y salto cualitativo similar a gamas superiores.
-Joystick de bola (también modificable por uno de bate y con un restrictor octogonal opcional ya que el que lleva de serie es cuadrado y puede que a algunos jugadores no les acabe de convencer, notándose mucho más en algunos juegos de lucha como Street Fighter).
-Compatible con botoneras y joystick Sanwa o Seimitsu de 30mm y creo que también 24 (ahora mismo son los que mejores sensaciones y similitudes guardan con el mundo Arcade, y el cambio sale más barato que hacerse con otro Arcade Stick mucho más caro). Cada pieza cuesta entre 2 y 2,50 €.
-Cable de varios metros de largo. Y hay gente que dice que es corto...
-Base sólida y pesada con la posibilidad de añadirle 4 patas superpuestas de anclaje. Aunque con la propia base y su protección de goma hay más que suficiente. No se mueve de la mesa. Os doy mi palabra. Además en el hueco siempre se puede meter más peso.
-Compatibilidad con PS4, Xbox One, Xbox 360, Pc según el fabricante, aunque al final funciona cualquier otro sistema como Playstation 3, una Raspberry y hasta un teléfono o tablet con Android y un adaptador OTG. Yo por el momento sólo lo he probado en el Pc y con Xbox 360. Pero es de las opciones más completas en cuanto a posibilidades. Lástima que no vaya en PSX, Wii, o PS2.
-Dos modos de Turbo ideales para los arcades de naves o aquellos tipo Contra.
-Múltiples configuraciones según el manual.
-Especialmente indicado para juegos de lucha, naves, plataformas... y resumiendo: todo tipo de juego que pudiera trasladarse al arcade.
-Firmware actualizable (la última versión lo hace compatible con la Neo Geo Mini y Nintendo Switch). Cuando escribí esto iba por la 1.16. Ahora está la 1.24.
-Se puede añadir un vinilo frontal, aunque con este modelo no lo han puesto nada fácil. Hay que rascar.
-Bastante robusto. No hagáis caso de la gente que dice que lo han partido o que se han cargado los botones. Hay que ser muy, pero que muy bruto. No obstante, si queremos algo que nos dure casi para toda la vida, podemos cambiarlo por los Sanwa antes mencionados. De todos modos los que lleva de serie y teniendo en cuenta el tute que le ha metido el anterior dueño, si han aguantado, por algo será.
Conclusiones del MayFlash Arcade Joystick Fightstick F300 años después de uso y la creación de esta entrada (2020-2023).
Tres años después, y aunque el uso no ha sido continuado ni prolongado en exceso, el MayFlash F300 todavía aguanta el tipo tal cual llegó a mis manos. Sobre todo porque suelo cuidar bien las cosas y no darle golpes como si fuera un gorila mientras juego. Si bien lo tenía bastante desactualizado, con la última versión salida hace un año, la 1.24, añade soporte para algún que otro sistema y alguna mejora o arreglo como la ausencia notable de cualquier tipo de lag (con versiones de firmware anteriores todavía se llegaba a notar bastante en algunos juegos, unos más que otros, llamando la atención que casi todos los que daban ese problema eran los que corrían por Steam). Sigue siendo igualmente robusto y la botonera únicamente necesita de vez en cuando una limpieza, y aunque las sensaciones no son idénticas a los componentes de Industrias Lorenzo o Sanwa, los clónicos se portan muy decentemente y aguantan todas las sesiones. Cuesta un poco configurarlo y a veces me da problemas con los puertos USB, conectándose y desconectando en el caso del PC, lo que me lleva a pensar que tiene que ser sí o sí un fallo del propio Windows.
También ahora, con Opl, parece ser que el Joystick ya funciona en Playstation 2. Pero eso aún tengo que confirmarlo y probarlo por mí mismo.
Es, todavía hoy, uno de los Arcade Stick más solicitados y comprados. Y no me extraña dada su versatilidad.
Como pegas todavía palpables, lo dicho de no ir nativamente con las más viejas Playstation y que por altura en la caja, no entren los sticks de Industrias Lorenzo.
Creo que todavía guardo una imagen del antes y el después. A ver si la subo más adelante.